AQUELLA LEGALIZACIÓN del PCE

30 aniversario de la legalización del PCE: fue el 9 de abril de 1977, Sábado Santo, a las 18 horas.

Fue una noticia-bomba, inesperada, impactante... Provocó miedo, estupor, indignación, furia, desazón, esperanza... Fue una ofensa, una traición, una alegría... Fue un hecho inteligente, inevitable, arriesgado... Todo, según la posición ideológica del oyente pasivo.

La noticia fue el final de una larga y secretísisma negociación, que salió a los aires, aprovechando el despiste de los españoles por ser Semana Santa: Los centros de trabajo y de decisión estaban cerrados, las ciudades vacías y todos, en general, relajados.

El años 1977 empezó duro: matanza de los abogados en Atocha, apertura de relaciones políticas con los países comunistas, legalización del PSOE, fin de la censura de prensa, secuestros de los generales Oriol y Villaescusa por el GRAPO...

En otro orden de cosas, Lauda destacaba en Fórmula I, el Atleti iba a por la Liga de Futbol, el Liverpool a por la Copa de Europa, Dire Streats, Pink Floyd, Queen, Fleetwood Mac resonaban en los vinilos internacionales, Bosé y Camilo Sesto en los nacionales, se preparaba el estreno de "La Guerra de las Galaxias", el poeta V. Alexandre era propuesto para el Nobel, A. Carpentier para el Cervantes, a D. Juan se le iba convenciendo de la necesaria renuncia a sus derechos a la Corona Española en favor de su hijo Juan Carlos...

La legalización fue un reajuste político necesario. Se pusieron las cosas en su sitio. El PCE tenía que ser legalizado. Los franquistas tuvieron que aceptarlo y "tragarse el sapo¨, aunque la digestión les duró hasta el 23-F. Los comunistas, a su vez, se tuvieron que tragar y también digerir la monarquía, la bandera y la unidad de España. Ambos bandos aquel día se echaron mano a las pistolas , pero no llegaron a desenfundar. Los primeros temían que las "hordas marxixtas", matando e incendiando conventos, hicieran una revolución y los segundos temían otro "glorioso alzamiento" de los militares fascistas.

Suarez fue el clarividente creador y gestor del acontecimiento y le salió bien. El rey bendijo la operación y, como se decía con una imagen muy sencilla, "estaba detrás".

Y no pasó nada.

Los más radicales de ambos bandos, franquistas y comunistas, se fueron a los rincones a lamentarse y a recordar tiempos pasados.

El PCE se desinfló y de aquel slogan en sus manifestaciones "Aquí, aquí se ve, la fuerza del PCE" se ha ido pasando a la desbandada de militantes. Hoy, los que quedan, son soñadores del realismo mágico, utópicos de ciencia-ficción. ¿Quien defiende hoy el comunismo con argumentos sólidos? ¿Qué comunista vive coherentemente con sus ideas? Sus ideas se contradicen con su vida real, burguesa. De vez en cuando se autoaniman, alborotan un poco, sermonean con la salvación y redención de esta sociedad capitalista, se quitan su mala conciencia de "aburguesamiento" y acusan de fascistas a quienes no piensan como ellos, pero que viven de forma parecida.

¿Y el puño cerrado, la hoz y el martillo, la "Internacional", el "Mundo Obrero"...? ¿Cuantos acuden a la "fiesta del PCE" y no les da vergüenza que les vean?... A pesar de todo, aún hay quienes esperan que... "tiene que llover a cántaros ", como cantaba el extremeño P. Guerrero con su voz de mozo de pueblo.

Genio y figura. Aquella legalización ya es prehistoria, pero también el PCE va siendo prehistoria.