12/12/06

Pinochet



Foto de la Junta Chilena en 1973: Pinochet, sentado, con el morro apretado, cual jabalí, gafas oscuras y gorra de plato sobre las piernas. Está de "duro".

Militar por empecinamiento -ingresó a la "tercera"-, siempre fue cumplidor, disciplinado, estricto y terco: "un militar nunca se cansa, ni abandona"-decía-. Pero también fue traicionero y felón con los gobernantes legitimamente establecidos. Al presidente Allende le había prometido fidelidad dos días antes del golpe. ¡Qué lealtad!

El 11 de septiembre de 1973 fue el final de un proceso preparado. La CIA venía buscando entre los militares el ariete contra la política de Allende de "vía pacífica al socialismo". Sus nacionalizaciones y planificación central asustaban a la burguesía chilena y al americano del norte. Pinochet fue el instrumento de USA para echarle del poder y dar un aviso a otros estados prosocialistas latinoamericanos.

Y llegó. La Casa de la Moneda echado humo a borbotones y la foto de Allende empuñando el AK-47, que le había rebalado Castro, presagiaron el cambio político.

Pinochet, ya instalado, se propuso "crear una nación de empresarios, no de proletarios". Su instrumento, la terrible DINA, que, "a la chita-callando", con premeditación y alevosía, se llevó por delante 2.095 muertos, 1.102 desaparecidos y asustó a un millón de chilenos que, por pies, a todo gas, acabaron en el exilio, cruzando los Andes de noche.

Para redondear la jauría persecutoria creó con sus colegas, el argentino Videla y el paraguayo Stroessner, la "Operación Cóndor" para acabar con los huídos como ocurrió con el exministro Letelier en una calle de Washington y con su antiguo protector el general Prats.

En cambio, si dio resultado y acertó, llamando para dirigir la economía, a los "Chicago boys", economistas neoliberales, postgrados en la Universidad de Chicago, discípulos mimados de Milton Friedman, mientras otros países sudamericanos seguían, erroneamente, con las políticas del Estado Protector.

Vergonzosos fueron los asuntos de los "pinocheques", el "boinazo", sus cuentas personales en el Riggs, Banco experto en blanqueo de dinero, sus depósitos de oro en el BSBC de Hong-Kong, las persecuciones judiciales de Garzón por Londres, las fotografías como presidiario, las ojeras, "mala cara", las falsas dolencias, triquiñuelas y artimañas para evitar la justicia...todo un número.

Ha muerto, mientras unos chilenos le elevan a los altares, otros le condenan al infierno. Lo peor de todo: decía que su modelo a seguir siempre había sido Franco, a cuyo entierro, efectivamente, acudió de forma aparatosa. En esto si que metió la pata. Podía haberse fijado en otro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

pues el pinocho siempre iba con el bigote impoluto, y ultimamente con los pantalones por los sobacos, al más puro estilo cachuli.

El estilismo con la capita vestido de general esta sacado de tito Franky (Pacorro). En cualquier caso, nunca ganaran a las chaquetas de cuero por las rodillas, cruzadas, con cinturón ancho de alemanes en la Second World War, por cierto, este año se lleva esa moda.

pinocho de madera, bye.

Anónimo dijo...

Fraga ha dicho: "Paz a los muertos. Allende era una catástrofe. Pinochet dejó un país mejor que el que encontró"