Injurias a la corona

Varios centenares de republicanos y radicales catalanistas alentaron a dos encapuchados a quemar fotografías de los reyes en protesta por su visita a Gerona.

Llevaban pancartas con slogans como:
"Los catalanes no quieren rey".
"Fuera el Borbón de Gerona".
"Si el rey quiere corona, nosotros se la daremos; que venga más a Gerona y el cuello le cortaremos".
"Yo también quemo al rey".

Leyeron en un manifiesto, en el que se decía que "la monarquía es ilegítima porque la restauró el dictador".

Ultimamente, abundan las supuestas injurias a la realeza. Pero lo límites de las injurias no están muy claros.

Precisamente, el próximo lunes se celebra un juicio en la Audiencia Nacional contra los periodistas de "Deia", Rodríguez y Ripa, por haber pintado borracho al rey Juan Carlos. En la viñeta "se jugaba semánticamente con si los dos, el rey y el oso, estaban borrachos o sólo estaba borracho el oso", todo ello, relacionado con una cacería en Rusia, en la que el rey mató a un oso, que presumiblemente habían emborrachado y drogado antes. Estos periodistas ya habían sido objeto de otra querella por injurias a la corona en 2003.

Mayor divulgación tuvo la supuesta injuria a Felipe de Borbón, heredero de la corona, y de Letizia en una viñeta de "El Jueves" en 20 de julio.

En fin, cada vez hay más injurias contra la corona, pero quemar fotografías, aunque no está bien, ha sido frecuente en el pasado. Recordemos la quema de fotos y de efigies de Nixon, cuando la guerra del Vietnam y en Palestina los seguidores de Hamas están abonados a arrimarle una cerilla encendida a banderas, fotos...

¡Qué cruz tiene el ser rey!, pero, bueno, puede dimitir.